Cuatro santos jesuítas, Capilla de San Ignacio, Hospital de Antezana

Atribuidas a Juan Vicente de Ribera, las pinturas murales que decoran la capilla de San Ignacio de Loyola son una bella muestra de pintura mural barroca de finales del siglo XVII o principios del siglo XVIII (Juan Vicente de Ribera firmó en 1689 las pinturas de la cúpula de la Capilla de las Santas Formas de la iglesia de los jesuitas y de 1704 es su «Apoteosis de San Felipe Neri», del oratorio de los Filipenses, ambas obras en Alcalá de Henares). Discípulo de Francisco Rizzi y de Antonio Palomino, destacó por sus trabajos al temple y por el gran dinamismo de sus composiciones. Su obra juega con los colores, la luz y la presencia de elementos vegetales y paisajísticos al gusto barroco.

Las pechinas de la cúpula de la capilla de San Ignacio de Loyola, situada a los pies de la iglesia del Hospital de Antezana, se decoran con las imágenes de cuatro importantes santos jesuítas: san Francisco de Borja, san Francisco Javier, san Luis Gonzaga y san Estalisnao de Kostka.

Cuatro bellas pinturas murales dedicadas a cuatro de los pilares fundamentales de la Orden fundado por Ignacio de Loyola. Cada uno de ellos supo aportar a la Compañía de Jesús su impronta y conocimientos:

SAN FRANCISCO DE BORJA:
Con la muerte de Isabel de Portugal, esposa de Carlos V, quedó tan conmovido que decidió abrazar la vida religiosa tan pronto como pudiera, de ahí su célebre frase de “NUNCA MÁS SERVIR A SEÑOR QUE SE PUEDA MORIR”
Cuando su esposa, Leonor de Castro, fallece, deja todas sus posesiones a su hijo mayor e ingresa en la Compañía de Jesús.
Se dedicó a la predicación y obedeció a San Ignacio, quien le nombró Comisario de España en las Indias, además fue tercer general de la Compañía.

-SAN FRANCISCO JAVIER:
Mientras realizaba estudios de filosofía y teología en París, conoció a San Ignacio de Loyola, quien le reclutó para su proyecto de fundar una nueva orden.
Instalado en la India portuguesa, cuidó enfermos, predicó el cristianismo y defendió la justicia frente a los abusos colonos.

-SAN LUIS GONZAGA
En 1585 ingresó en la Compañía de Jesús. Murió durante una epidemia de peste, entregado al cuidado de los enfermos. Fue canonizado por Benedicto XIII y proclamado patrono de la juventud.

-SAN ESTANISLAO DE KOSTKA

Con 13 años su padre le envió a Viena a estudiar a un colegio de jesuitas y pronto empezó a dedicar grandes ratos a la oración. Después de una grave enfermedad, confesó que se le había aparecido Santa Bárbara en compañía de dos ángeles que le habían traído personalmente la comunión, luego que se le apareció la Virgen con el Niño Jesús en brazos y que ellos le habían curado, además de encargarle entrar a la Compañía de Jesús. Francisco de Borja (mencionado en este post) fue quien le admitió en el noviciado.

Cuatro santos jesuítas, Capilla de San Ignacio, Hospital de Antezana

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