Sociedad de Condueños de los Edificios que fueron Universidad
El nacimiento de la Sociedad de Condueños de los Edificios que fueron Universidad es uno de los hechos más importantes en la historia de Alcalá de Henares durante el siglo XIX. Una hazaña protagonizada por los alcalaínos salvando el conjunto del antiguo Colegio Mayor de San Ildefonso (la conocida manzana fundacional). 50.000 reales fue lo que pagó en 1845 Joaquín Alcober por gran parte del conjunto universitario. En 1846, cede sus derechos a Joaquín Cortés a cambio de 70.000 reales, con la obligación, por parte del gobierno, de conservar aquellos elementos de más valor artístico. Pero el nuevo propietario debía creer que el edificio tenía poco valor ya que quiso transformar el antiguo conjunto universitario en un criadero de gusanos de seda. Pero Cortés no era más que un testaferro y pronto apareció el auténtico promotor de tanto desatino, Javier de Quinto, que, tras pagar al anterior 30.000 reales, se convirtió en el único propietario.
Javier de Quinto desmontó las campanas de la capilla de San Ildefonso, la balaustrada del Trilingüe y el Arco de la Universidad. Todo esto provocó la indignación del pueblo de Alcalá de Henares que, reunido el 28 de octubre de 1850 en el Palacio Arzobispal, decidió crear una comisión con el objetivo de comprar a Javier de Quinto los edificios de la Universidad. Se pusieron a la venta 900 acciones o láminas de 100 reales con la condición de que nadie pudiera comprar más de diez. Así se consiguieron los 90.000 reales, que se pagaron el 12 de diciembre de 1850, dando origen a una de las instituciones alcalaínas más importantes: la Sociedad de Condueños de los Edificios que fueron Universidad. El día 12 de enero de 1851 se firmó ante el notario de la ciudad complutense, Gregorio Azaña, la escritura de constitución. Su primer presidente fue José de los Ríos, y el segundo fue Miguel de Pascual.
Gentes de todas las clases sociales (desde excatedráticos hasta albañiles y carpinteros) participaron en este ejemplar hecho y se propusieron mantener los edificios, conservar sus valores artísticos y conseguir que tuvieran un uso docente. En ellos, se instaló una Academia de Caballería y más tarde, entre 1865 y 1931, un Colegio de Escolapios. A mediados del siglo XX, tras una profunda restauración, el conjunto se convirtió en sede del INAP (Instituto Nacional de Administración Pública), aunque el mejor premio para los Condueños fue ver como en 1977 se recuperaba para la ciudad se función universitaria. Actualmente el conjunto del antiguo Colegio Mayor de San Ildefonso es el rectorado de la Universidad de Alcalá de Henares.