La restauración de la casa de Cervantes de Alcalá de Henares
La restauración de la casa de Cervantes de Alcalá de Henares es un ejemplo de cómo se entendía la rehabilitación de un monumento histórico a mediados del siglo XX.
En 1551, la familia Cervantes, debido a su mala situación económica, se vio obligada a vender su residencia de Alcalá de Henares y se trasladó a Valladolid, donde estaba en esos momentos la Corte, intentando escapar de la pobreza e iniciar una nueva vida. A partir del abandono de la casa, llevándose todo lo que tenían, el inmueble pasó por numerosos propietarios, sufriendo un progresivo deterioro y quedando bastante desfigurado con respecto a como se encontraba en el siglo XVI.
Tras el descubrimiento del investigador Luis Astrana Marín, el Ayuntamiento de Alcalá decide en 1953 comprar la vivienda para convertirla en Casa de Cervantes y Biblioteca y Museo Cervantino. Hasta ese momento el edificio estaba ocupado por seis familias. En 1954, se cede al Ministerio de Educación Nacional, que va a ser el encargado de llevar a cabo las importantes obras de restauración que se realizaron. Hubo mucha polémica sobre cómo hacer estas obras, decidiéndose al final reconstruir prácticamente todo el interior evocando una vivienda de la época en la que nació el escritor.
Las obras, dirigidas por el arquitecto José Manuel González Valcárcel, finalizaron en 1956 y, además de las reconstrucciones y acondicionamientos parciales del interior, se edificó una nueva fachada abierta al jardín que se creó en el solar que daba a la calle Mayor. Los antiguos pies derechos de madera del patio fueron sustituidos por columnas y capiteles renacentistas procedentes del palacio Arzobispal de Alcalá de Henares. Se mantuvo el zaguán de entrada desde la calle de la Imagen, el pozo, la cueva de ladrillo, una interesante pared con pinturas murales del siglo XVI…
Se inauguró, también en 1956, con el nombre de «Museo Casa Natal de Cervantes». Desde 1985 depende de la Consejería de Cultura y Deportes de la Comunidad de Madrid.
