Anton van den Wyngaerde y su descripción de Alcalá de Henares

En la España del siglo XVI, si hubiéramos sido coetáneos suyos, le habríamos llamado Antonio de las Viñas o Antón de Bruselas. Se llamó Anton van den Wyngaerde y fue un magnífico y reconocido dibujante de arquitecturas y paisajes que se entusiasmó, recorrió y dibujó las principales ciudades españolas de la época.

Nació en Amberes en el primer cuarto del siglo XVI, se formó como dibujante en su tierra, los Países Bajos, y pronto comenzó a viajar por Europa. Mantuvo una estrecha relación con Inglaterra, donde estuvo en varias ocasiones. Incluso se le atribuye las primeras representaciones de Londres en el siglo XVI (Panorama of London, 1543-1550).

Sus viajes por los Países Bajos, por Inglaterra y por Italia y sus dibujos panorámicos de ciudades y lugares comenzaron a darle fama en la corte española, hasta el punto de ser contratado en 1557 como pintor de cámara de Felipe II. Su papel en la corte hispana fue importante, convirtiéndose en una especie de reportero gráfico al servicio del rey. Siguió viajando, en algunas ocasiones acompañando a Felipe II en visitas de carácter institucional. En otros casos actuó casi literalmente como reportero, por ejemplo cuando acompañó a las tropas españolas en las batallas contra el rey francés Enrique II, como la de San Quintín. De estos acontecimientos dejó importantes representaciones gráficas.

A instancias de Felipe II se instaló definitivamente en España en 1561. En 1562 estaba con su familia en Madrid. En objetivo del rey era encargarle un importante trabajo: una descripción corográfica de ciudades, villas y pueblos de España. A partir de entonces no dejó de recorrer el país. El resultado de su trabajo fue una colección de sesenta y dos vistas, que se han convertido en documentos excepcionales a lo hora de estudiar la evolución histórica de los lugares que dibujó.

Sus dibujos combinan una minuciosa técnica pictórica, donde demuestra un gran dominio de la perspectiva y del detalle, con la incorporación de conocimientos geográficos y topográficos en la descripción de las imágenes dibujadas.

También pasó por Alcalá de Henares, donde dibujó (1565) una perspectiva de la ciudad tomada a vista de pájaro desde el camino de Madrid. Nos encontramos con una ciudad amurallada y nos recibe la primitiva Puerta de Madrid. El recinto amurallado se prolonga hasta la antigua Puerta de Mártires o de Guadalajara, al final de la calle Libreros.

En el dibujo sobresale, a la derecha, la Magistral y, a la izquierda, el conjunto del Palacio Arzobispal. En el centro se ve con claridad la calle Mayor porticada y hacia la derecha se percibe el conjunto universitario. Al fondo, destacan los cerros que rodean la ciudad, donde se percibe el castillo de Alcalá la Vieja y el nombre de la ermita de la Vera Cruz. A la derecha, el río Henares y su soto rodea Alcalá de Henares, con sus fincas, molinos y ermitas. Pero sobre todo, el dibujo de Wyngaerde es una bella y realista representación del entramado urbano de una ciudad que estaba creciendo y convirtiéndose en uno de los grandes centros universitarios de Europa.

Antonio de las Viñas murió en Madrid el 7 de mayo de 1571.

Anton van den Wyngaerde y su descripción de Alcalá de Henares

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