El Museo de la Perfumería de Gal
El Museo de la Perfumería de Gal se encontraba instalado en la antigua fábrica de Perfumería Gal de Alcalá de Henares. La empresa, que fue fundada en 1898 en la madrileña calle Arenal, inauguró en 1961 sus instalaciones en nuestra ciudad. El antiguo edificio de Gal está considerado como un notable ejemplo de arquitectura industrial, obra de Manuel Sainz de Vicuña. Actualmente, tras restauraciones parciales, está pendiente una rehabilitación integral que convierta al edificio en uno de los principales centros culturales de la ciudad. En 2004, la empresa trasladó sus instalaciones a un nuevo edificio en el polígono industrial de La Garena.
Gal contaba en su edificio de Alcalá de Henares hasta el traslado de 2004 con un pequeño pero magnífico museo dedicado a la historia de la empresa y de la perfumería en España. Los fondos del museo se embalaron y se trasladaron al nuevo edificio de La Garena y desde entonces allí deben seguir, pero sin ser expuestos. El caso es que por su calidad y piezas conservadas, debería ser un importante activo cultural para nuestra ciudad.
La colección de Gal es, sin duda, una de los mejores en su género. En el museo de Alcalá de Henares se recogía la trayectoria de la empresa en sus primeros 75 años y suponía un auténtico paseo por la historia del perfume y el mundo que lo rodea a lo largo del siglo XX, desde los antiguos polvos de arroz que usaban nuestras abuelas hasta los sofisticados perfumes de hoy en día. Formaban parte de la colección todo tipo de utensilios como marmitas, filtros, matraces, estuches y envases estilo Art Decó o frascos pero, sobre todo, destacaba la excelente recopilación de carteles publicitarios, de entre los que sobresalían los de diseño modernista. Artistas tan prestigiosos como Rafael de Penagos, Bartolozzi o José Caballero fueron los encargados de realizar estas magníficas obras. Entre los premios expuestos figuraba el León de Oro, conseguido por la casa Gal en el Festival de Cannes de 1972, en el apartado de cine publicitario.
