Forjas de Alcalá, arquitectura histórica industrial en Alcalá de Henares
Forjas de Alcalá, arquitectura histórica industrial en Alcalá de Henares
Alcalá de Henares conserva algunos buenos ejemplos de patrimonio industrial. Uno de ellos es, aunque muy transformado y en gran parte reconstruido, el de la fábrica Forjas de Alcalá. Su historia tiene que ver con la de los primeros esfuerzos por industrializar nuestro país. En este sentido, parece lógico que la propuesta naciera con el aval y el control de los empresarios más punteros de la época: los alemanes. Con capital español y alemán, aunque con el control técnico exclusivamente germano, se puso en marcha hacia 1920, en el antiguo camino de Teatinos, esta empresa dedicada a la construcción y reparación de material móvil ferroviario.
El capital español vino de la mano de José María de Canda-Argüelles y del Busto, aristócrata (IV conde de Canda-Argüelles) , abogado y diputado provincial que, entre otras propiedades contaba con la gran finca del antiguo convento franciscano del Santo Ángel o de Gilitos de Alcalá de Henares, donde falleció en 1921.
Forjas de Alcalá prosperó a la vez que el ferrocarril. Su desarrollo tuvo que ver con la visión de una ciudad que prometía ser importante en el desarrollo industrial de esta zona de España. Su situación en una de las zonas estratégicas desde el punto de vista geográfico, gracias a situarse junto a la carretera a Zaragoza y Barcelona, hizo que pronto fuera objeto de este tipo de iniciativas de desarrollo industrial.
Hasta la Guerra Civil de 1936, se desarrolló como una importante empresa vinculada al auge del ferrocarril, empleando a muchos complutenses y construyendo un gran complejo fabril (dos fundiciones, talleres, talleres , depósitos de carbón, diseño…). Las infraestructuras de la fábrica fueron incautadas por el gobierno republicano durante la contienda del 36 y reutilizadas para la fabricación de material bélico, como obuses.
Uno de sus primeros responsables fue el ingeniero de origen alemán Víctor Schmehlik, que llegó a ser director de la factoría y que estuvo muy vinculada a nuestra ciudad. Aparece en el directorio de miembros de la Asociación de Ingenieros Eléctricos alemanes (1925), aunque su labor se volcó en el desarrollo industrial español, consiguiendo incluso la ciudadanía de nuestro país. Es curiosa la solicitud de convalidación del título de Doctor en Medicina por la Universidad de Viena que solicitó para su hijo Camilo, aprobada en el BOE de 18 de marzo de 1942: «Don Víctor Schmehlik, ciudadano español, presenta instancia en solicitud de que se convalide, por el equivalente español, el título de Doctor en Medicina expedido por la Universidad de Viena a favor de su hijo don Camilo Schmehlik».
Otro ingeniero de la fábrica de origen alemán que acabó muy vinculado a Alcalá de Henares fue Conrado Dietrich Johnen, para el que el arquitecto José de Azpiroz y Azpiroz diseñó el hotel de aires alpinos centroeuropeos que aún se conserva el el Paseo de la Estación.
La empresa creció y se convirtió en un motor de desarrollo económico local y provincial. En los años 50 del siglo XX, llegó a contar con unos de 750 trabajadores. Este crecimiento motivó que se construyera una gran nave, proyectada en 1954 por el arquitecto Eugenio Gutiérrez Santos (autor del antiguo aparcamiento de la plaza de Santo Domingo y coautor de la Torre del Retiro, ambas obras en Madrid). Un magnífico ejemplo de arquitectura industrial con una gran estructura diáfana abovedada, que contaba con un ramal del ferrocarril, apeaderos y diferentes plataformas móviles.
La empresa desapareció en 2002, aunque la gran factoría languidecía desde los años 70 del siglo pasado. La nave de Forjas de Alcalá poco a poco fue rodeada de desarrollos urbanos (Los Nogales, el Ensanche…), aunque su estado de abandono era muy preocupante, al menos hasta que el Club de Tiro con Arco Sagitta rehabilitó una parte como sede del club. En 2011, el ayuntamiento de Alcalá de Henares, propietario del edificio, adjudicó las obras de transformación del resto del edificio en una instalación deportiva. Las obras de renovación incluyó, no sin polémica, la reconstrucción completa de la estructura abovedada. Actualmente, la antigua fábrica Forjas de Alcalá se ha convertido en el centro deportivo gestionado por Forus «Forjas de Alcalá», inaugurado en 2015.