Cartel de Alcalá de Henares, Patronato Nacional del Turismo
Uno de los carteles publicitarios más bellos de Alcalá de Henares que conozco es el que creó el pintor y arquitecto Joaquín Vaquero Palacios para el Patronato Nacional de Turismo. Una pieza artística magnífica, que sigue la línea marcada por el citado organismo de desarrollo turístico para su campaña de 1928-1929. 25 obras de arte, donde la expresión de la bellezas monumentales y paisajísticas de España se dejó llevar por la innovadora corriente de colores y formas nacida con el «art decó» y por las manos de grandes artistas del diseño, el dibujo y la pintura, influidos por creadores como Hugo D´Alesi, Rober Broders o Paul Colin.
El Patronoto Nacional de Turismo, creado en 1928 durante la dictadura de Primo de Rivera y heredero del Patronato Regio de Turismo y de la Comisión Regia de Turismo, desarrolló interesantes propuestas de desarrollo y promoción turística, como la creación de la red de Paradores o iniciativas publicitarias modernas e innovadoras. Entre estas últimas estuvo la edición, entre 1928 y 1929, de 25 carteles en cuatro idiomas (español, inglés, francés y alemán), que fueron encargados a artistas como Joaquín Vaquero Palacios, Roberto Baldrich, Rafael de Penagos, Sánchez Tejada… El dinero que recibieron por cada cartel no fue mucho, 500 pesetas, pero lo compensaba la proyección nacional e internacional que podía adquirir su obra.
El nuevo organismo de gestión turística participó activamente en la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929 y en ella fueron presentados los 25 carteles, que pronto se convirtieron en un reclamo popular y fácilmente reconocible. Hubo concursos, valoraciones de la crítica, más exposiciones… En fin, una gran iniciativa en torno a un sector que empezaba a percibirse como fundamental para el desarrollo de nuestro país.
Cartel de Alcalá de Henares, Patronato Nacional del Turismo
En cuanto al cartel de Alcalá de Henares, obra de juventud del pintor y arquitecto asturiano Joaquín Vaquero Palacios, es una bella muestra de ese sentido «art decó» que se le quiso dar a la colección. Representa lo fundamental de nuestra ciudad: su carácter universitario renacentista y su vinculación a Miguel de Cervantes como su ciudad natal. La expresión «Cuna de Cervantes» nos lleva a sentir a Alcalá de Henares como el origen de Cervantes y también, en cierta manera, de la singularidad de su obra gracias al espíritu humanista nacido de la Universidad fundada por Cisneros. «Universidad del Renacimiento», es una manera de englobar en dos palabras la misma idea por la que la Unesco declaró a la ciudad Patrimonio de la Humanidad en 1998: el primer modelo de ciudad universitaria de la Edad Moderna. Vaquero Palacios lo tuvo claro y lo representó mediante la bella fachada del Colegio Mayor de San Ildefonso, con la fuente de los Cuatro Caños todavía frente a ella, definida a partir de trazos rápidos y ágiles, colores terrosos remarcados en sus tonos por sombras y contrastes, como el del azul del cielo, los blancos verdosos o los toques grisáceos. Y todo ello, presentando un mundo sugerido de confort, de aventura, de buen vivir, de un turismo en cierta forma selecto, que muestra a una pareja vestida a la moda que ha parado su vehículo de lujo ante el gran monumento.
La calidad del cartel hizo que se siguiera utilizando durante la Segunda República, con la única variación de poner un sello con la leyenda: «República Española».